martes, 10 de noviembre de 2015

El significado primordial de la danza


La danza, así como el canto y el grito, es una de las condiciones innatas del ser humano. El primer conocimiento del mundo, anterior a la palabra, es el conocimiento a través del movimiento. En un sentido originario, la danza es un movimiento que surge de lo profundo del ser humano. La danza es movimiento de intimidad; es impulso de unión a la especie. La danza es un modo de ser en el mundo que representa una vía privilegiada de acceso a nuestra identidad originaria; es la expresión de la unidad orgánica del hombre con el universo.

El poeta Jalal Al-Din Rumí (siglo XIII) exclamaba: 




! Oh día, levántate!... los átomos danza, 
las almas, arrebatadas de éxtasis, danzan, 
la bóveda celeste, a causa de ese Ser, danza. 
Te diré al oído hacia donde conduce su danza: 
Todos los átomos que hay en el aire y en el desierto
-compréndelo bien- están enamorados
como nosotros, y cada uno de ellos, feliz o desdichado, 
se encuentra deslumbrado
por el sol del alma incondicionada




Una sesión de Biodanza es una invitación a participar en esa danza cósmica de la que habla el poeta sufí. Esta afirmación tal vez resulte sorprendente dentro del melancólico panorama socio-político de nuestro tiempo. En un mundo como el nuestro, de hambre y genocidio, de tortura y delación, en un mundo de abandono infinito, ¿cómo es posible ponerse a bailar?.

Mi propuesta no consiste sólo en bailar, sino en realizar ejercicios específicos, inspirados en el  significado primordial de la danza, estructurados a partir de gestos naturales del ser humano cuyo fin es activar las potencialidades afectivas que nos conectan con nosotros mismo, con el semejante y con la naturaleza. 

                                                                                        Estracto del libro Biodanza. Rolando Toro.